El pasado 4 de Noviembre del presente año, el Concejo municipal de Mosquera sesionó en el teatro municipal para debatir sobre la concesión CCFC para la construcción de infraestructura y vías.
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Este debate fue citado por el Concejal Nelson Parra quien habló de los atropellos a los ciudadanos municipales por parte de la concesión, tales como, la demora en la en entrega de las calcomanías para el cobro del peaje, los altos costos para colocar la calcomanía por segunda vez en caso de robo o pérdida y el beneficio limitado que se le otorga a las empresas del municipio debido a los pocos cupos para la tarjeta.
En cuanto a las obras
adelantadas por la concesión se encuentran la construcción del enlace del CAR-
ICA en tres esquinas, el puente peatonal en Managua, la intersección Mosquera-La
Mesa y la entrada del municipio de Corzo hasta Bojacá. Sin embargo, las críticas
más renuentes giran en torno a que de 27.000 personas se encuentran
clasificadas dentro de la categoría especial como beneficiadas por el
reglamento de la Agencia Nacional de Infraestructura, pero solo 1800 personas
son atendidas mensualmente para adquirir la calcomanía debido a que la Agencia
Nacional de Infraestructura atiende 3 veces por semana, según el Concejal Hernán
Cortez quien exige la reducción del
tiempo en la entrega de la calcomanía.
Por su parte el Concejal Juan
Diego Bareño propone la creación por municipio de una oficina de Atención al
Cliente para agilizar el trámite de la calcomanía, además menciona que a muchos
conciudadanos al cambiar de domicilio les ha sucedido que no pueden hacer una
modificación de los datos para obtener la tarjeta.
Recordemos que esta concesión
lleva 21 años con el municipio y es una concesión a perpetuidad en donde el
recobro se hace por parte de la nación y me pregunto ¿Dónde está la inversión
frente a las ganancias de la concesión?; ¿Cuánto se piensa recobrar por los
habitantes de sabana occidente?.
Además, mi critica se une a
esta situación debido a que los tiempos de entrega de la calcomanía es un abuso
contra nosotros los ciudadanos de los municipios de Funza y Mosquera porque el
costo del peaje de la Calle 13 es de $7.100, representando anualmente
$2.591.500 pesos y por el lado de la
Calle 80 es de $10.600, siendo entonces al año $77.380.000 pesos. Adicional a
esta situación, no es suficiente el abuso en el pago del peaje, sino que
también nos tenemos que aguantar el caos vehicular por trancones casi
imposibles de descongestionar, una proyección a futuro de urbanización,
entonces donde quedan nuestros humedales, lagunas y el ecosistema en general.
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