miércoles, 5 de julio de 2017

LA BICI Y LA MOVILIDAD ECOLógica

Sostenibilidad: dícese de termino discursivo mainstream utilizado por instituciones gubernamentales y no gubernamentales para auto promoverse en la onda verde, en búsqueda del reconocimiento de distintos actores políticos, económicos y sociales para (…) No, no ¡basta!… el termino en verdad fue empleado por primera vez en el siglo XVIII por el alemán Hanns Carl von Carlowitz en matrimonio con el desarrollo, ¡Sí! desarrollo sostenible definido como “Asegurar que se satisfaga las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones para satisfacer las propias” [1] en el famoso Informe Brundtland (Our Common Future) de la ONU en 1987.

Y qué tiene que ver este término tan trabajado y definido por la responsable y consiente comunidad internacional preocupada por el medio ambiente con la bici inclusión. Un cambio del uso de automóvil, autobús y motocicleta hacia la bicicleta como una opción de transporte urbano contribuye al mejoramiento de la calidad del aire y la disminución de emisiones de gases de efecto invernadero tanto para la actual generación como para las venideras.

Según el informe Estimación de emisiones provenientes de fuentes móviles en el tramo vial Bogotá – Facatativá del 2013[2] de la Universidad Nacional, la flota de vehículos livianos y camiones son los que emiten más monóxido de carbono, se dice que este gas cuando es liberado al ambiente permanece en la atmósfera dos meses, esto se convierte entonces en un problema de salud pública ya que al ser respirado en altas dosis puede afectar el corazón y cerebro[3]. Pero las flotas de buses y camiones no se quedan atrás, según el mismo informe son los mayores emisores de óxidos de nitrógeno al ambiente, este contiene tanto monóxido como dióxido de nitrógeno con efectos en la salud humana como infecciones pulmonares e insuficiencias respiratorias; y ambientales como limitación del crecimiento vegetal y acidificación de ecosistemas[4]. 

Si bien, el transporte no es el mayor contribuyente de CO2 al cambio climático, pues en Colombia la agricultura y la energía son los que tienen mayor impacto, a nivel mundial el transporte tiene un porcentaje significativo del 13,1% de huella de carbono[5], he ahí cuando la sostenibilidad debiera dejar de ser un término abstracto y discursivo de entes gubernamentales y no gubernamentales a convertirse en políticas públicas de alto impacto y largo alcance. 

Entonces…

Como hemos visto en las entrevistas realizadas a Laura Bahamon, Julio Forigua y los concejales Nilson Díaz y Jairo Forero por Hijos del Zipa durante el mes pasado, la administración se está pellizcando para impulsar el uso de la bicicleta y así promover la movilidad sostenible en el municipio de Funza. 

Así también, tuvimos la oportunidad de compartir con tres emprendedores que han impulsado desde su cotidianidad y han hecho de la bicicleta un estilo de vida: Andrés Prince de Vive las Ruedas, líder de esta fundación que crea conciencia vial por medio de diversas actividades relacionadas con la bicicleta. 


German, un apasionado al ciclismo que ha hecho de su emprendimiento todo un museo, si usted es un aficionado no puede perderse la visita y un dialogo con este experto. 


Mike Cáceres,  biciturista, quien nos demostró que no se necesita sino de una bici y muchas ganas para recorrer el mundo. 


En esta búsqueda por responder la pregunta ¿Qué se hace en nuestro municipio frente a la bici inclusión? Nos encontramos con distintas acciones tanto gubernamentales, colectivas e individuales, que si bien sirven de ejemplo, me llamó la atención un tema al que todos se acercaron.

Una de las cosas más interesantes de cada una de las entrevistas es el llamado a la cultura ciudadana en el uso de la misma, y no está de menos. A mi parecer y como bici usuaria he sido también testigo de la crisis de bici cultura en el municipio, y esto no solo compete al bici usuario, también a los diferentes actores que están inmersos en el flujo de la movilidad, conductores de automóviles, busetas, camiones, y claro, los peatones que aún desconocen el uso de los andenes, las ciclo vías, las cebras viales y el general de las señales de tránsito. Me parece más que interesante, relevante el aporte que nuestros amigos de Vive las Ruedas han hecho al municipio con el Manual del Ciclista Urbano, un esfuerzo pedagógico para articular las decisiones políticas con la ciudadanía, que no solamente deberíamos leer los bici usuarios y conductores de vehículos, buses, camiones o motocicletas, sino también los peatones.

El sinsentido común pareciera reinar en la mente de muchos de los actores que protagonizan el flujo de la movilidad en los municipios, la convivencia ciudanía se vuelve un problema y los malestares sociales comienzan a emerger, y todo esto parece estar relacionado con un problema de cultura ciudadana, de desconocimiento de la normatividad que está hecha para regular las relaciones en la vía y la primacía del individualismo en la calle.



Claramente, por esto, las acciones de la administración en cuanto a movilidad, con esto me refiero a las metas de las que el Secretario de Movilidad Julio Forigua nos comentó sobre bicicletas públicas, bici parqueaderos, circuitos de ciclo rutas y todo lo que compete al Plan Maestro de Movilidad, debieran estar articuladas con una pedagogía consiente a la ciudadanía, pues no de mucho sirve la construcción de infraestructura, la inversión en señales viales y demarcación, y todos los esfuerzos conjuntos por promover la bici inclusión, cuando la cultura de la ciudadanía va en contravía.  En este esfuerzo nos sumamos nosotros como colectivo Hijos del Zipa y aplaudimos la labor que hacen cada uno de los emprendedores de hacer de la bici un estilo de vida e incentivar a otros a rodar para promover una movilidad ecoLógica, satisfaciendo nuestras necesidades de movilidad del ahora sin comprometer el aire y los recursos de los futuros guapucheros en sana convivencia, porque también está en nosotros como ciudadanos que ese tan nombrado término de la sostenibilidad deje de ser meramente discursivo y abstracto y comprobemos con hechos lo que con palabras expresamos que pensamos, y es que el término “esfuerzos conjuntos” también lo involucra a usted como ciudadano.



Andrea Jeréz Cantor
profesional en Política y Relaciones Internacionales
Universidad Sergio Arboleda
Hija del Zipa




[1] http://www.unesco.org/new/fileadmin/MULTIMEDIA/FIELD/Havana/pdf/Cap3.pdf
[2] file:///C:/Users/PCdoctor/Downloads/2509-6272-1-PB.pdf
[3] https://www.atsdr.cdc.gov/es/phs/es_phs201.pdf
[4] http://www.mapama.gob.es/es/calidad-y-evaluacion-ambiental/temas/atmosfera-y-calidad-del-aire/calidad-del-aire/salud/oxidos-nitrogeno.aspx
[5] http://www.aclimatecolombia.org/huella-de-carbono/